La carreta delante de los bueyes

La excusa es siempre el dinero. Para ciertos sectores ideológicos, todos los proyectos comienzan y acaban por allí. Habría que recordarles que nunca habrá suficiente, nunca sobrará tampoco. Sin embargo, probado está que quienes han invertido la ecuación, han conseguido siempre sacar sus proyectos adelante.
A estas alturas, he visto y oído suficiente al respecto, y cada vez me queda más claro que el problema no es el dinero, sino el enfoque y la falta de proyectos verdaderos. Lo primero es tener una idea, un proyecto, y luego veremos cómo lo ponemos en marcha. Pero sin esa idea, sin esa iluminación, sin esa claridad, jamás llegará el dinero; muy por el contrario, vendrá la ruina, porque la carencia del proyecto se comerá el dinero, sea mucho o poco, sea una fortuna o una miseria. Los grandes inventores, los más grandes genios de la humanidad, nunca tuvieron dinero para generar sus ideas, lo que tuvieron fue una idea, una idea brillante en mente, como el inventor de la bujía eléctrica, por ejemplo, y tantos otros.
Poner el dinero como impedimento, es lo que se llama poner la carreta delante de los bueyes. Osea frenar toda posibilidad de avance, toda posibilidad de sacar un proyecto, y es lo que ocurre y está ocurriendo en nuestro país. Los proyectos fracasan, sostienen, porque no hay dinero, cuando lo que en verdad ocurre es justamente al revés, fracasan porque no hay tales proyectos, no hay tales ideas, sino vaguedades que no acotan la realidad. Es, definitivamente, un problema ideológico, una manera, una forma de mirar la realidad que termina por arruinar lo poco que hay, como vemos que está ocurriendo en Educación.

Miguel de Loyola – Santiago de Chile – Diciembre del 2015.